Holanda avanza a su tercera final de Mundial tras vencer a Uruguay 3 a 2

Previa

Solo un partido previo en los Mundiales de fútbol entre estas dos pequeñas naciones, fue en Alemania 1974, la naranja mecánica derrotó a Uruguay por 2 a 0 en la primera fase. Ahora se verán las caras en semifinales, buscando cada uno su tercera final de un Mundial.

Ambas selecciones disputaron su sexto enfrentamiento, el segundo en mundiales. Uruguay venció a Holanda en dos ocasiones (2-1 y 2-0) en los Juegos Olímpicos de 1924 y 1928, en los que se proclamó campeón. Tras la victoria de Holanda por 2-0 en el Mundial de 1974, disputado en Alemania, el partido previo entre ambos combinados fue en el Mundialito de 1980, que se resolvió con victoria de Uruguay por 2-0.

Uruguay 2:3 (1:1) Holanda

6 de julio de 2010 20:30 – Estadio Green Point, Ciudad del Cabo
Asistencia: 62.479 espectadores
Árbitro: Ravshan Irmatov (Uzbekistán)
Goles: Diego Forlán 41′, Maximiliano Pereira 90+2′; Giovanni van Bronckhorst 18′, Wesley Sneijder 70′, Arjen Robben73′.

Crónica:

La selección de Holanda derrotó 3-2 a Uruguay (el último país sudamericano con vida) y de esta forma los Oranje se clasificaron para la tercera final en su historia, con goles marcados por Giovanni van Bronkhorst, Wesley Sneijder y Arjen Robben. Por la Celeste marcaron Diego Forlán y Maxi Pereira.

El partido comenzó muy disputado en lo físico pero con pocas chances para los dos equipos que estaban más preocupados por no recibir un gol que por marcar el primero. Apenas tímidas aproximaciones se vieron en esos primeros minutos, con Sneijder intentando asumir la manija del partido para los europeos y Forlán encabezando los ataques charrúas.

Pero, de pronto, el gol llegó de la manera más inesperada. Giovanni van Bronckhorst recibió una pelota pegado a la banda, levantó la cabeza y mandó un impresionante disparo que se coló por el ángulo mas alejando del pórtico de Fernando Muslera, que alcanzó a arañar la pelota con los dedos pero sólo logró desviarla contra el poste, antes de que besara la red (0-1, 18’).

Uruguay debió lanzarse al ataque entonces, frente a unos holandeses que parecían muy cómodos con la ventaja en el marcador. Los intentos celestes no fueron demasiado contundentes, hasta que, cuando expiraba la primera mitad, el disparo de media distancia volvió a ser un arma mortal. Esta vez fue Diego Forlán, que mandó un potentísimo obús, que descolocó a Stekelenburg y entró casi por el medio del marco holandés (1-1, 41’).

En la segunda mitad, los celestes empezaron con mayor determinación, y mantenían el control del balón, aunque sin generar oportunidades del todo claras. La más importante fue al minuto 50’ cuando Forlán escapó por la banda, Stekelenburg tuvo que salir a defender su marco y dejó libre la portería. El rebote le quedó a Edinson Cavani quien disparó, pero sin fuerza, y van Bronckhorst llegó a tiempo para despejar sobre la línea.

El partido se animó, y en minutos consecutivos, los dos guardametas tuvieron que hacer grandes atajadas, hasta que, a veinte del final, Holanda tuvo la suerte de los ganadores: rodeado de un mar de piernas charrúas y cerca del borde del área Sneijder mandó un potente disparo rasante, que pasó entre las piernas de Robin van Persie siguió hacia una esquina del arco dejando sin oportunidad de defensa a Muslera (1-2, 70’).

Los charrúas apenas se recuperaban del golpe, cuando Holanda igual que ante Brasil en pocos minutos asestó el sablazo definitivo. Desde el costado izquierdo Dirk Kuyt mandó un centro milimétrico a la cabeza de Robben, cuyo remate a la esquina de la portería de Muslera fue incluso superior. Un golazo que le daba la tranquilidad a Holanda (1-3, 73’).

Esa calma pudo haber sido incluso mayor, pero Robben falló dos mano a mano ante Muslera en los últimos minutos, y Holanda estuvo a punto de pagar las consecuencias. Cuando se había cumplido el tiempo efectivo y Uruguay atacaba con más corazón que orden, Maxi Pereira se encontró con una pelota en la puerta del área naranja y definió como los grandes con un remate combado (2-3, 90’+2).

Los últimos segundos fueron cardíacos. Los charrúas empujaron a sus rivales hacia su propia área y mandaron peligrosos pelotazos que, sin embargo, la defensa holandesa supo resolver, para asegurar así el boleto a la final de la Copa Mundial de la FIFA Sudáfrica 2010. Allí le espera el ganador del encuentro entre España y Alemania.

Los «Oranje» ampliaron a 24 el número de partidos sin perder, una racha que comenzó en 2008, y en el Mundial de Sudáfrica es la única que ha ganado sus seis compromisos y ahora espera el desenlace de la semifinal del miércoles a las 13h30, entre Alemania y España.



Categorías:Actualidad

Etiquetas:

Deja un comentario