El festejo colombiano con El Campín lleno

El debut del anfitrión fue lo más importante en la segunda jornada del Mundial y hoy se nos viene el esperado debut de «La Mini Tri», equipo del cual esperamos nos haga pasar el trago amargo de la Copa América con los adultos.

EL RESUMEN DE LA JORNADA – Mientras la canícula asediaba Cali por la tarde, los fuertes aguaceros obligaron a posponer los saques iniciales de los partidos de Bogotá. Camerún, aunque marcó dos goles, no ganó contra los neozelandeses, que no anotaron ninguno. Uruguay y Portugal, después de un primer tiempo soporífero, despabilaron en la reanudación. Y la selección anfitriona, tras caer en desventaja ante su público frente a Francia, dio un brillante vuelco a la contienda. La segunda jornada de la Copa Mundial Sub-20 de la FIFA 2011 ha deparado todas las emociones… ¡y sus contrarias!

Llevada en volandas por todo un estadio -y por todo un país- favorable a su causa, Colombia arrancó mal su Copa Mundial al dejarse colar un tempranero gol de Francia. Pero la ola amarilla enseguida se tragó a los Bleuets mediante una demostración de poderío (4-1). Anteriormente, la República de Corea había dado buena cuenta de los malienses, acaso perturbados por el diluvio que precedió al encuentro. Otra decepción para los africanos la protagonizó Camerún, que inscribió dos goles en su duelo contra Nueva Zelanda, pero uno de ellos en la portería equivocada. Los Leones, como los All White, se consolaron con el empate entre Portugal y Uruguay. Quién lo hubiera imaginado: en la clasificación del grupo, los dos modestos van por delante de los dos favoritos, aunque todos tengan un punto. Para los Kiwis es el primero que suman en la prueba, puesto que perdieron sus tres compromisos de 2007.

Resultados
Grupo A
Malí 0-2 República de Corea
Colombia 4-1 Francia

Grupo B
Camerún 1-1 Nueva Zelanda
Portugal 0-0 Uruguay

Gol del día
Luis Muriel (48’), Colombia-Francia
Magnífico y fundamental. Así podría calificarse la joyita de Luis Muriel, que permitió a los Cafeteros tomar ventaja sobre los franceses. Luego de recibir un pase desde el centro del campo, Michael Ortega desvió sutilmente el esférico con el talón hacia la carrera de Muriel. El delantero hizo un recorte que dejó tirado en el suelo a Kalidou Koulibaly y ya solo tuvo que engañar al desdichado Jonathan Ligali para introducir el balón en la portería.

Momentos clave de la jornada
Un pedazo de África en Cali
Aunque jugaban a miles de kilómetros de su país, los cameruneses se debieron de sentir como en casa en Cali, por las tribunas mayoritariamente a su favor, por el mismo calor al que están acostumbrados, y por un ambiente que recordaba al del continente madre sobre todo a causa del fragor de las vuvuzelas en el estadio Pascual Guerrero. Si añadimos a eso el resonante Waka Waka de Shakira en los alrededores del recinto, obtenemos una atmósfera casi totalmente africana. Lo cual, por lo visto, no perturbó lo más mínimo a Nueva Zelanda, que aguó la fiesta de su rival adjudicándose el empate.

El Goliat maliense y los Davides surcoreanos
Incluso los espectadores más alejados de la cancha pudieron percatarse del contraste: en medio de los jugadores surcoreanos, el maliense Kalifa Coulibaly parecía un gigante. Incontenible en ataque, sobre todo en el primer periodo, el delantero de 1,97 de estatura hizo todo lo posible, la mayor parte de las veces de espaldas a la portería, para abastecer de balones a sus compañeros y para fabricarse ocasiones claras de gol. Pero la historia se ha repetido y David ha vuelto a tumbar a Goliat.

Familia numerosa, familia dichosa
Antes de saltar al campo del estadio Nemesio Camacho, apodado el Campín, los colombianos se conjuraron en el vestuario. En medio del abrazo colectivo, el capitán Pedro Franco gritó: «¡Somos grandes! ¡Somos muy grandes!». A lo cual, el preparador físico respondió: «¡Somos 11! ¡Pero somos 46 millones!». La prueba de que tenía razón y de que todos los colombianos están en efecto con su selección se hizo patente cuando el público al completo pintado de amarillo se puso a cantar durante la interpretación del himno nacional. Ese ha sido uno de los momentos más emotivos de este principio del torneo.

Números que hablan
4: Es la cifra de penales que se pitaron a lo largo de esta jornada. Dos de ellos fueron transformados, por el surcoreano Jang Hyun Soo y por el colombiano James Rodríguez. Dos fueron fallados: el primero por el goleador cafetero, que chutó contra el guardameta francés; el segundo por el camerunés Christ Mbondi, que tuvo la suerte de poder aprovechar el rebote para engañar al guardameta neozelandés Stefan Marinovic.

Próxima jornada
Los dos grupos siguientes disputarán su primera etapa este domingo 31 de julio. En el Grupo C, España intentará justificar su rango de favorito frente a Costa Rica, mientras que Australia y Ecuador ansiarán empezar el certamen con buen pie. En el lote D, es difícil prever un favorito en el emparejamiento Croacia-Arabia Saudí, mientras que Nigeria gozará del favor de los pronósticos contra Guatemala.

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