La Universidad de Chile ganó el primer título internacional de su historia en su cancha del estadio Nacional de Santiago y ratificó su condición de mejor equipo de la Copa Sudamericana 2011 al golear por tres a cero a una combativa Liga de Quito, que tuvo que conformarse con las medallas del segundo puesto.
La figura del partido fue el delantero Eduardo Vargas que anoto dos de los goles de la U, el primero apenas a los tres minutos de juego al aprovechar un mal rechace de los «albos» y el segundo sobre el final del partido en una apilada monumental; el tercer gol fue obra de Gustavo Lorenzetti.