Comenzó la UEFA Euro 2012 de Polonia y Ucrania, la mayor competición en El Viejo Continente a nivel de selecciones nacionales. Durante la jornada inaugural se han disputado un total de 2 partidos, ambos correspondientes al Grupo A, en el que se encuadran Polonia, una de las anfitrionas, Grecia, campeona del torneo en 2004, Rusia y Chequia.

Empate a uno en el partido inaugural
Como suele ser habitual en este tipo de competiciones internacionales a nivel de selecciones, el partido inaugural estuvo protagonizado por una de las selecciones organizadoras del torneo. La competición arrancó en Varsovia, capital polaca. El equipo anfitrión intentó llevar el peso del partido en los compases iniciales, buscando constantemente agradar a su público, que abarrotó las gradas del Estadio Nuevo de Varsovia.

Con un juego por bandas magnífico por parte de la selección dirigida por Szmuda llegaron las primeras ocasiones, con Lewandowski acaparando los flashes del estadio y metiendo el miedo en el cuerpo a Chalkias, el meta del equipo heleno.

Tanta insistencia, sobre todo por banda derecha con Blaszczykowski y Piszczek terminó con un centro del último en el minuto 16 que finalizó con un espléndido remate picado de cabeza Lewandowski. El gol del atacante del Borussia Dortmund puso la calma en la selección local, tanto que Grecia comenzó a dominar el encuentro y a rondar la portería de Szczesny incluso cuando con una injusta expulsión de Papastathopoulos el equipo griego se quedó con 10 efectivos.

El descanso sentó bien al equipo vestido de azul, pues al inicio de la segunda parte, en el único error de la defensa polaca hasta el momento, un balón suelto en el área grande fue rematado al fondo de las redes por el delantero Salpingidis.

Grecia, que había sido dada por muerta prematuramente, se repuso de manera excepcional al hecho de jugar desde la primera parte con un hombre menos y comandada por el incombustible Karagounis y el revulsivo Fortounis consiguió filtrar un balón que Salpingidis, autor del tanto del empate, se disponía a introducir en la portería de Szczesny cuando el guardameta derribó al delantero y se ganó la expulsión, además de decretar el colegiado Velasco Carballo la pena máxima. Karagounis, capitán heleno asumió la responsabilidad del lanzamiento y Tyton, guardameta que sustituyó a Szczesny paró el penalty.

Con el fallo del penalty murió el partido, sin más ocasiones destacables y con un empate que terminaron dando por bueno ambos equipos tal y como se desarrollaron los acontecimientos.

Goleada rusa para cerrar la jornada

En el partido que sucedió al Polonia-Grecia, disputado en la ciudad de Wroclaw enfrentó a la selección de Rusia, favorita al liderato del Grupo A según las apuestas, y a República Checa, liderada por Cech, reciente campeón de la Champions League con el Chelsea.

El dominio, aunque no lo parezca viendo el marcador final, comenzó siendo del equipo checho, que rondó en varias ocasiones la puerta de Malafeev hasta que Rusia en una contra aprovechó un remate al palo de Kerzhakov para marcar en el rechace por medio de Dzagoev.

Nuevamente, Dzagoev se convertiría en protagonista del segundo tanto ruso, pues una mala asistencia para Kerzhakov fue aprovechada por Shirokov para marcar ante la pasividad de la defensa checa.

Con esta renta y sin que Chequia diera muestras de peligro se llegó al descanso, tras el cual, como había sucedido en el partido anterior, se recortaron las distancias con el gol de Pilar.

Este tanto checo espoleó a su equipo a tratar de conseguir cuanto menos el empate, pero con más actitud que peligro real. Esta situación, ideal para un equipo tan veloz como el ruso en ataque propició el tercer tanto, obra nuevamente de Dzagoev y un cuarto tanto tras una jugada individual del corpulento Pavlyuchenko.

Con este resultado de 4-1 finalizó el encuentro y la jornada del Grupo A que abrió la competición y que lidera Rusia con 3 puntos seguidos con un punto por Polonia y Rusia, con Chequia en último lugar tras su contundente derrota.

Fuente: suite101.net
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