Tras el silbatazo final en la victoria del Benfica sobre el Vitoria Guimaraes este fin de semana en la Liga de Portugal, algunos aficionados invadieron el terreno de juego para convivir con los jugadores de las Águilas. Uno de ellos fue brutalmente interceptado por elementos de seguridad, algo que molestó al entrenador del equipo local, Jorge Jesus. En respuesta, Jesus entró a defender al aficionado de los golpes y agarrones que recibía por parte de la policía.

“Los aficionados invadieron el terreno de juego y la Seguridad intentó detenerlos. Yo quería que lo dejaran en paz ya que sólo buscaba la camiseta de algún jugador”, declaró Jesus.

Después del incidente, Jorge Jesus fue arrestado y llevado a declarar por “interferir con el trabajo policial”, hecho confirmado por el periódico Eurosport. En adición a los cargos criminales que se le puedan dar al técnico portugués, una suspensión de tres años podría ir incluída por parte de la federación portuguesa de futbol.

Fuente: futbolspaiens.com
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