Luego de dialogar con los capitanes de los equipos Universidad Católica y Liga de Loja, los jugadores del Deportivo Quito no pudieron lograr que este partido no se juegue en el estadio Olímpico Atahualpa.

Los chullas intentaron convencer a sus colegas futbolistas luego de que los directivos del club anunciaron que no pagarán la deuda de 250.000 dólares que mantienen con algunos acreedores y, por la cual, se encuentran suspendidos por la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF).

Tras no cancelar este valor, el elenco capitalino no está habilitado para jugar el compromiso del domingo ante Emelec en el estadio George Capwell.

Los jugadores del Quito llegaron al Olímpico Atahualpa alrededor de las 11:20 para dialogar con su compañeros de profesión; ellos intentaron accedan a los camerinos, pero los policías los detuvieron.

“Vamos a conversar con los capitanes de los equipos del partido de hoy (U. Católica y Liga de Loja) para pedir que no se juegue (el compromiso)”, comentó Rorys Aragón, portero de los chullas.

Édison Vega, capitán del Quito, comentó: “Hablamos con Edwin Tenorio (vicepresidente de la Asociación de Futbolistas Profesionales) y él nos apoya en todo. Buscamos de nuestra forma buscar soluciones”.

Iván Hurtado y Edwin Tenorio, presidente y vicepresidente de la Asociación de Futbolistas Profesionales (AFE), respectivamente, llegaron al estadio para dialogar con los jugadores del Quito, que intentaron ingresar cuando se desarrollaba el compromiso, pero no lo lograron porque la fuerza pública los detuvo.

Fuente: eluniverso.com
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