Ayer miércoles, luego de que su automóvil fue incautado por una deuda del club con el ex asistente técnico Eduardo Vaca, Joselito Cobo, anunció su renuncia a la Presidencia de Deportivo Quito.

Aunque la dimisión aparentemente tenía el carácter de irrevocable, un día después, el directivo anuncia que declinó la decisión y afirma que seguirá al frente del club, atendiendo la solicitud de varios sectores del equipo.

En entrevista con Radio La Deportiva, Cobo confirmó su permanencia: “Son situaciones de la vida que le ponen sabor y amor, y un poco de coraje a uno para seguir adelante, para seguir trabajando. Hemos nadado tanto tras llegar en un momento muy complejo donde las olas estaban bravas, con nuestro equipo a punto de desaparecer. Tenemos muchos proyectos, acercamientos comerciales, la confianza de jugadores, de cuerpo técnico y de compañeros directivos.”

“Es muy emocionante lo que se vive en la institución y ese respaldo del cuerpo técnico, de compañeros directivos, de hinchas, de amigos, que se han acercado a exteriorizar su solidaridad por lo sucedido ayer. Me bajaron lágrimas. De tanto trabajo, de tanto esfuerzo, de tanta mala noche que ha dado el Quito, creo que era momento de lavar los ojos.

Estaré al frente de la institución hasta cuando Dios quiera, porque es el equipo de mis amores y es el equipo de mi ciudad, la ciudad que me ha dado todo.”, añadió.

El Presidente se refirió a la demanda de Vaca, la cual derivó en el embargo de su automotor: “Por los medios siempre he venido haciendo un llamado público a todos los acreedores del Deportivo Quito para llegar a acuerdos porque llegar a estos términos legales es muy complicado y genera gastos. No sé qué pasó. Al señor Vaca no tengo la oportunidad de conocerlo y no teníamos conocimiento del trámite. Ésta es una lección que nos va a hacer meditar.”

“Me tocó bajarme del auto, que es mi segunda oficina, y entregar las llaves. Fue doloroso que llegaran a las cosas personales, pero son las cosas de la vida de las que uno aprende. Tenemos que buscar acercamientos con todos los acreedores. Nunca he negado las deudas y vamos a honrar todas. Al Señor Vaca le pido una reflexión; él debe recordar que si el 20 de octubre no llegaba, el Quito desaparecía y nadie de los acreedores podía cobrar.”

“Lamentablemente, hubo administraciones nefastas que se presentaron antes. Ésta es la realidad que nos ha tocado asumir, una situación muy delicada. Sabíamos a lo que llegábamos, pero llegábamos a salvarle al Deportivo Quito. La prioridad nuestra está en el equipo de primera porque si no hay equipo de primera, no hay Deportivo Quito. Hoy más que nunca, tenemos que estar unidos, la familia del Quito es una familia con dos corazones.”, agregó.

Cobo admitió que presidir a la AKD ha sido muy duro para él, pero no piensa tirar la toalla: “Yo ayer pensé en cabeza caliente decir “me voy de Deportivo Quito” y viró la página, y me olvido de todos los problemas. El Deportivo Quito ha sido un dolor de cabeza en lo personal y en lo familiar. Uno se planteó un reto y, cuando llegué a Deportivo Quito, me planteé que debemos llegar a cosas grandes. Con esa visión, con ese objetivo y con esa actitud positiva, todos estamos para cosas grandes, y estoy seguro de que lo vamos a lograr.”

Ahora le toca el turno de respaldar a la afición: “Mañana quiero tener a toda la familia de Deportivo Quito, quiero el apoyo de la hinchada y estar en un estadio con doce o quince mil personas, hinchas de Deportivo Quito, eso será mi felicidad, y eso compensará todo el esfuerzo, el sacrificio, y los momentos difíciles que he pasado.”

“Aquí estamos para seguir trabajando por la institución, no nos vamos a rendir. Como ya he dicho, al Quito no lo van a ver caer.”, añadió.

Fuente: futbolecuador.com
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