Transcurría el minuto 67 cuando el línea Byron Romero llamó al juez central para informarle que un hincha de  Barcelona lanzó una piedra y lo impactó en el brazo. Producto de aquello la sangre no se hizo esperar y se paralizó el partido aproximadamente 18 minutos.

Minutos después el agresor fue identificado e inmediatamente fue retirado del estadio Monumental, escoltado por  miembros de la Policía Nacional.

Esta agresión está claramente penada en el reglamento de la FEF en la que indica que lanzamiento de algún objeto con impacto, el club local recibirá sanción de no poder utilizar su estadio cuando haga las veces de local por el tiempo que estime la Comisión de Disciplina de la FEF, por ende la directiva amarilla tendrá que ir buscando otro escenario deportivo para jugar sus partidos en el torneo local.

Fuente: ecuagol.com
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