Delfín salvó el invicto de su estadio durante la temporada y mantuvo la punta de la segunda etapa del fútbol ecuatoriano tras cumplirse la décimo segunda fecha, todo gracias a un penal inexistente cobrado por el árbitro Roddy Zambrano a dos minutos del final de su partido ante Barcelona, que gracias a la buena ejecución de Carlos Garcés dejó el marcador 1-1.
Emelec por su parte, le sacó los seis puntos al Deportivo Cuenca, al cumplirse los partidos de la fecha espejo por cambio de fase y gracias a ello subió al segundo puesto de la tabla, a solo un punto del líder, y con un nivel de juego muy mejorado, respecto a los partidos anteriores.