Con dos semanas de retraso, una por la consulta popular y otra por la inconsulta intromisión de elementos externos al fútbol ecuatoriano, esperamos que mañana de inicio la temporada 60 del fútbol profesional ecuatoriano.
Una larga y aburrida novela se ha dado previo al inicio del torneo, los derechos de transmisión por televisión del torneo es el botín que buscan varios facinerosos y no tienen reparo en usar para sus propósitos a dirigentes, periodistas, medios y todo lo que tengan a su alcance. La realidad es que para que el fútbol ecuatoriano crezca, es necesario que la transmisión de los partidos sea por la televisión pagada. Quien lo haga, no me importa.