Julio Díaz Gaitán, empresario de 48 años, vicepresidente administrativo de Barcelona –desde el inicio del periodo de José Francisco Cevallos–, cuestiona que las decisiones del club giren en torno a lo que dicen el presidente Cevallos y el vicepresidente financiero Alfredo Cuentas. Díaz cree que el titular torero está mal asesorado y menciona que las sesiones de directorio son un ‘monólogo’ del exarquero.