Napoli pegó tres tiros en los palos, generó sus chances y aún así no le alcanzó. No logró pasar del empate sin goles ante un Parma que todavía tiene opciones de descender en la última jornada de Serie A, y estuvo a punto de ceder el liderazgo del fútbol italiano en manos de un Inter que sufrió un empate agónico de Lazio.
El partido comenzó parejo aunque con la iniciativa marcada por los dirigidos por Antonio Conte. Y así comenzaron a llegar las chances, sabiendo que incluso si el Nerazzurro no ganaba y el equipo napolitano sí lo hacía, sería campeón.
Zambo Anguissa, de lo más peligroso de Napoli, tuvo una chance que podría haber sido el gol del año. El camerunés recibió y la mató con el pecho, tiró un sombrerito y sacó un zurdazo abajo que pegó en el palo.
La jugada fue a los 33′, y el equipo acechaba pero no dañaba. Pocos minutos después, encima, Inter marcaba sobre el final del a primera mitad el 1-0 ante Lazio por intermedio de Bisseck.
En el comienzo del complemento, y sabiendo que Napoli estaba comprometiendo la punta, lo fue a buscar. Le costó, sí. No fue claro, no. Y sin embargo volvió a estrellar el palo.
Politano desbordó y tiró un centro que casi se cuela por el segundo palo, pegando en el travesaño.
Apenas después, Scott McTominay, de tiro libre, exigió al máximo al arquero Suzuki, quien desvió el venenoso remate a su palo directo al travesaño. Parecía no ser la noche de Napoli.
Sin embargo, las buenas noticias vinieron desde afuera. Pedro, a los 72′, igualaba para Lazio en el Giuseppe Meazza. Y la tribuna lo festejaba como un propio gol del equipo napolitano.
El sueño parecía derrumbarse entre la poca claridad del equipo de Conte y un nuevo gol de Inter, convertido por Dumfries de cabeza, para el 2-1. Pero cuando el otro partido parecía irse, Pedro tuvo la chance de penal por una mano en el área y marcó el 2-2, desatando un clima de locura inexplicable para un equipo que no podía marcarle a Parma.
Las emociones, increíblemente, no cesarían. Hubo un gol de Inter y un penal para Napoli por falta cometida sobre Neres. Pero ocurrió lo impensado: la conquista del Nerazzurro fue anulada por fuera de juego, y el penal por una falta previa de Giovanni Simeone.
Napoli terminó teniendo más suerte afuera que en su partido y conservó la punta de cara a la última fecha. Si gana en su casa frente a Cagliari todo terminará en su favor. Pero Inter tiene chances, y visita a Como a la misma hora del próximo domingo.
Fuente: ESPN.com.ec
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